Entrar en el metro de Moscú -y en el de San Petersburgo- es como hacer un viaje en el tiempo y, a bordo de unas eternas y empinadísimas escaleras mecánicas que dan vértigo al más curtido de los no rusos, pero que los rusos que tienen prisa bajan dando zancadas de dos o incluso tres escalones y a toda velocidad, te trasladas un poco a la Unión Soviética. Y no sólo por la escenografía, sino también por la presencia de unas señoras con boina roja que parece que duermen en unas cabinas que hay en los extremos de las escaleras, pero en realidad no duermen, sino que vigilan con atenta y misteriosa mirada, y, si te sales de tu sitio, te llega una bronca monumental: «¡Permanezca a la derecha, y si camina, vaya por la izquierda!». De esta frase, de esta norma sin cuyo conocimiento no es prudente adentrarse en las profundidades del metro ruso, Bulat Okudzhava escribió esta maravillosa cancioncilla que, no lo podemos evitar, tiene para nosotros un cierto trasforndo político que no sabemos si el autor quiso darle. Probablemente no, porque nuestras referencias políticas no son las suyas, pero no hay que olvidar que uno de los grandes valores de la poesía es que con el tiempo cobra significados que, quizás, no son los que quisieron darle sus autores…
Como siempre, se agradecen las correcciones y críticas…
Песенка о московского метро
Мне в моем метро никогда не тесно,
потому, что с детства оно, как песня,
где вместо припева, вместо припева:
– Стойте справа! Проходите слева!
где вместо припева, вместо припева:
– Стойте справа! Проходите слева!
Порядок вечен, порядок свят.
Те, что справа, стоят, стоят.
Но те, что идут, всегда должны
держаться левой стороны.
Но те, что идут, всегда должны
держаться левой стороны.
Cancioncilla sobre el Metro de Moscú
Jamás fui apretado en mi Metro,
porque desde mi infancia, el Metro es una canción
cuyo estribillo dice, cuyo estribillo dice:
¡Permanezcan a la derecha, pasen por la izquierda!
cuyo estribillo dice, cuyo estribillo dice:
¡Permanezcan a la derecha, pasen por la izquierda!
Norma eterna, sagrada norma:
quienes van por la derecha, se paran, se paran
pero quienes caminen, deben siempre
hacerlo por el lado izquierdo…
pero quienes caminen, deben siempre
hacerlo por el lado izquierdo.
Bulat siempre andaba en la linea fronteriza de lo que se podía decir. Un dedo de pie fuera ….